Por su lado Scrum es una metodología agil muy conocida y popular en el mundo del desarrollo de software, permitiendo a equipos multidisciplinarios una constante entrega de valor de forma regular a través de “sprints”, en proyectos en los que los requisitos pueden cambiar constantemente y los resultados se tienen que obtener en un plazo corto. Hoy scrum, al igual que design thinking se expandió, se utiliza en todas las áreas y desarrollos que requieren entregas constantes y con mejora contínua.

¿Por qué estas dos metodologías funcionan juntas?

Scrum se enfoca en el proceso de ejecucción considerando funcionalidades requeridas  y algunas características clave, pero no establece como determinar estas características y es aquí donde Design Thinking con sus herramientas visuales y su proceso de 5 pasos es la gran opción.

Ambas metodologías comparten el desarrollo incremental y las iteraciones, ambas se centran en las personas y se orientan a la solución para el cliente.

Si quieres saber más sobre estas metodologías en B2V SinFronteras contamos con casos de éxito en cambio y agilidad y hemos desarrollado entrenamientos en Design Thinking, Agilidad y Cambio para la transformación agil que tu organización requiere.

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Somos personas transformando personas

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