Por: Agustin Vidal Papadam
“Para ganar más, explora la ley de la oferta y la demanda, y conviértete en un profesional inusual en el mercado de trabajo utilizando el Modelo Tr” Seiti Arata
Ningun extremo es bueno. Las organizaciones requieren una mezcla de generalistas y especialistas, que dependiendo del giro y de la cadena de valor, se inclinirán los porcentajes más para un lado o para el otro. Cuanto más industrial sea el servicio, más especialistas requerimos.
Hoy analizaremos ventajas y desventajas para las organizaciones de contar con perfiles más generalistas o más especialistas, sin embargo el mix depende más del tipo de mercado, que tanto de una elección de la empresa, aunque la empresa pueda definir una estrategia al respecto. Por ejemplo podría contratar más generalistas e invertir en su especialización en un determinado campo, sacando ventaja que la persona tiene una visión más general y amplia, y cuesta menos contratarla, pero la desventaja que una vez capacitado, puede irse a otra empresa donde le pagarán mejor su especialización. Volvemos al tema, que el salario emocional, junto con el salario monetario deben tener una buena combinación para retener talento, tema bastante complicado hoy en día.
Los generalistas son aquellas personas que tienen una visión más amplia de la organización, conocen la cadena de valor y cada parte clave en ella, más no se especializaron en ningún aspecto en particular ni del negocio, ni de la cadena de valor y por ello pueden ser más flexibles, cuentan con una amplia perspectiva del negocio y la organización, tienen la capacidad de desarrollar nuevas habilidades de manera rápida y son claves en el momento de cubrir vacantes para evitar una interrupción del negocio. A su vez, a veces, su falta de profundidad de conocimientos y habilidades en un área específica no permite ser tan competitivos, y esto puede llevar a ser menos eficientes.
Los especialistas son aquellas personas y posiciones que requieren una especialización técnica profunda para poder llevar a cabo su tarea y enfrentar los desafíos cotidianos, dado que las situaciones que se presentan cambian los requerimientos o dificultades de manera continua, y por ello en general no son tareas rutinarias. Estos perfiles más técnicos tienen algunas ventajas para las organizaciones, y les da una ventaja competitiva su profundidad en los conocimientos, son más eficientes al resolver problemas nuevos y son más innovadores debido a la flexibilidad que deben tener para aplicar su especialización a nuevas situaciones. Suelen ser personas reconocidas en su ambito por su experiencia y conocimiento, y esta ventaja, puede transformarse en una desventaja organizacional si la personalidad del especialista es de “diva” y tiene oportunidades de interrelacionamiento. Además, otra desventaja para la organización es la alta dependencia de esta persona y por ello también alto costo de retención. Podemos tambien encontrarnos con personas que tienen oportunidades en su forma de interrelacionarse y comunicarse impactando en la colaboración con otras personas y áreas.
Como verán, no se ni bueno, ni malo contar con perfiles generalistas o especialistas, más bien depende de las necesidades de la organización decidir ocupar un puesto con perfiles con unas u otras características. Lo que la organización no puede permitir es absoluta dependencia de nadie para el logro de sus objetivos, por lo cual debe balancear el proceso y los perfiles para el logro e sus resultados en el mediano y largo plazo.
Reflexión: La estructura organizacional y el modelo de gobierno deben ser definidos en función del propósito de la organización teniendo en cuenta que no se puede depender de una persona solamente. B2V los puede apoyar en lograr este balance en las estructuras
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